Historia Alternativa
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Armada de Chile
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Coat of arms of the Chilean Navy
Escudo de la Armada de Chile
Activa 1818 en adelante
País Bandera de Chile Chile
Fidelidad Chile
Rama/s Armada
Función Seguridad exterior y defensa militar del país.
Tamaño • 25 000 marinos, infantes de marina y aviadores navales
• 150 embarcaciones (80 buques y 70 embarcaciones menores)
• 52 aeronaves.
Acuartelamiento Valparaíso (I zona naval)
Talcahuano (II zona naval)
Punta Arenas (III zona naval)
Iquique (IV zona naval)
Puerto Montt (V zona naval)
Equipamiento Véase anexo
Alto mando
Comandante Almirante Julio Leiva Molina
Comandantes
notables
Thomas Alexander Cochrane
Manuel Blanco Encalada
Roberto Simpson
Oscar Viel y Toro
Juan José Latorre
Arturo Prat
Jorge Montt
Juan Williams Rebolledo
Luis Pardo Villalón
José Toribio Merino Castro
Raúl López Silva
Insignias
Pabellón nacional Flag of Chile
Bandera de proa Naval Jack of Chile
Distintivo de cola de la Aviación Naval Chilean Naval Aviation Roundel
Cultura e historia
Lema "Vencer o Morir"
Colores Azul Marino
Marcha Recuerdos de 30 años, Los Nibelungos, Anclas bajo la estrella
Himno Brazas a ceñir
Aniversarios 21 de mayo Combate naval de Iquique
13 de agosto Consagración al Sagrado Corazón
8 de octubre Combate de Angamos
Historia Chile No Socialista
Guerras y batallas
http://www.armada.cl
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La Armada de Chile es una de las instituciones que conforman las Fuerzas Armadas de Chile que reúne las funciones de marina de guerra, guardia costera, policía marítima, lacustre y fluvial.

Cuenta con 25 000 efectivos, incluidos 5000 efectivos de infantería de marina. Las funciones no vinculadas con su rol de marina de guerra (apoyo a la navegación, guardia costera, policía marítima, lacustre y fluvial, etc.) las concentra en un organismo dependiente, denominado Dirección General del Territorio Marítimo y Marina Mercante de Chile (DIRECTEMAR).

Historia[]

Antecedentes[]

En la época de la independencia, en Chile, país insular por su geografía, había ideas difusas sobre la importancia del mar, aunque en varios próceres existía conciencia de la importancia de éste para la supervivencia de la república. Costó comprender que el Poder Naval no se improvisa y que es necesario crearlo con tiempo.

Durante el siglo XIX el país se vio envuelto en varios conflictos en los que el dominio del mar fue determinante para el triunfo de las armas chilenas, pero al término de éstos, por economía, se olvidaba la importancia de contar con una Armada, desmantelándose la mayor parte de las unidades existentes. Sólo al término de la Guerra contra España los gobernantes chilenos aprendieron la lección y crearon una Armada eficiente y preparada.

Chile posee una costa de más de 4.300 kilómetros de largo que se proyecta hacia la cuenca del Pacífico. Distancia equivalente a la existente entre Madrid y Moscú.

Siglo XIX – Inicio y desarrollo[]

El general José Miguel Carrera Verdugo fue quien adquirió y equipó las primeras naves destinadas a la Armada de Chile, pero no alcanzaron a llegar a Chile ni pudieron izar su pabellón.

Se considera que fue en el gobierno del capitán general Bernardo O'Higgins Riquelme, en 1817, cuando nació la Armada de Chile. Asegurada la independencia de Chile, los asuntos navales estuvieron a cargo del gobernador político y administrativo de Valparaíso, secundado por el capitán de puerto. El 15 de octubre de 1817 se designó a don Juan José Tortel como Comandante interino de Marina. En 1818 se creó la Primera Escuadra Nacional, la Academia de Jóvenes Guardiamarinas, la Infantería de Marina y la Comisaría de Marina y se dictaron las primeras disposiciones para su organización.

El 10 de octubre de 1818 zarpó de Valparaíso al mando del capitán de navío Manuel Blanco Encalada la Primera Escuadra Nacional compuesta por el navío “San Martín”, la fragata “Lautaro”, la corbeta “Chacabuco” y la fragata “Araucano”. Su misión era interceptar en el sur, a la altura de la isla Mocha un convoy de naves españolas que traían refuerzos a El Callao. La escuadra obtuvo su primera victoria en el puerto de Talcahuano, el 28 de octubre de ese año, con la captura de la fragata española Reina María Isabel.

A principios de 1818 el gobierno de Chile contrató a Lord Thomas Alexander Cochrane, marino británico de origen escocés, al que le otorgó el grado de vicealmirante y lo designó jefe de la Escuadra, escuadra con la cual Chile y Argentina esperaban obtener el dominio del Pacífico para enviar una expedición libertadora al Perú.

Cochrane a su vez contrató casi exclusivamente oficialidad y tripulación angloparlante con una importante minoría de hispanos y que sentaron la escuela de la Marina Chilena. Con ellos conseguiría importantes triunfos, destacándose la Toma de Valdivia, el puerto más defendido y artillado después del Callao.

Conseguida la independencia de Perú, el gobierno decidió disolver la Escuadra debido a los graves problemas financieros que enfrentaba.

En 1836, Chile y la Confederación Argentina, por separado y sin formar alianza le declararon la guerra a la Confederación Perú-Boliviana, para ello se tuvo que formar nuevamente una Escuadra, la que al mando del ahora vicealmirante don Manuel Blanco Encalada zarpó el 19 de octubre de 1836, siendo conocida como la Primera Campaña Restauradora, la que culminó sin éxito, firmándose el Tratado de Paucarpata. Luego vino una Segunda Campaña Restauradora donde el Ejército, esta vez al mando de Bulnes logró la victoria: Previamente, la Armada había derrotado a su similar confederada en el Combate Naval de Casma. Terminada esta guerra con el triunfo de Chile, el gobierno nuevamente desarmó la Escuadra por economía.

En 1865, Chile decidió apoyar a Perú en el conflicto con España, declarándole la guerra (Guerra Hispano-Sudamericana), para lo cual una vez más tuvo que formar una Escuadra. En esta guerra marítima, pese a la captura de la goleta Covadonga, Valparaíso fue bombardeado por la Escuadra española el 31 de marzo de 1866, la Armada chilena se mantuvo a la distancia sin intervenir. Chile en esta ocasión aprendió la lección de la importancia de contar con naves de guerra en forma permanente obteniendo la entrega de dos corbetas retenidas en Inglaterra y ordenando la construcción de dos blindados que tendrían en el futuro gran importancia.

En 1879 nuevamente Chile entró en guerra contra Perú y Bolivia en la que se denominó Guerra del Pacífico. En los inicios de esta confrontación, se efectuó el Combate Naval de Chipana y posteriormente, el 21 de mayo de 1879 se desarrolló el combate naval de Iquique, en el cual el Capitán de Fragata Arturo Prat Chacón al mando de la corbeta de madera Esmeralda murió peleando contra el monitor blindado Húascar hasta el hundimiento de su nave: El momento clave de la guerra que marcaría su desarrollo y posterior desenlace.

En esta guerra hubo tres acciones navales más, que en corto tiempo permitieron a la Escuadra chilena conquistar el dominio del mar y transportar al Ejército a sus teatros de operaciones en Tarapacá, Tacna y Lima. Estas fueron, el mismo 21 de mayo de 1879, en la que el capitán de corbeta Carlos Condell de la Haza, al mando de la goleta de madera Covadonga logró el hundimiento de la fragata blindada Independencia en el combate naval de Punta Gruesa y el 8 de octubre del mismo año en que la Escuadra chilena al mando del capitán de navío Galvarino Riveros, en el combate naval de Angamos, capturó al Monitor Huáscar, navío que tras feroz lucha fue incorporado a la Escuadra chilena, muriendo heroicamente su comandante, Miguel Grau. El tercer hecho es el Desembarco y Toma de Pisagua, apoyado por la Escuadra y que constituye el primer desembarco armado, bajo resistencia enemiga y con resultado exitoso de la Historia Universal. (Antes hubo muchos desembarcos, pero eran sin resitencia enemiga o cuando la había la victoria correspondió siempre a los defensores, desde Maratón hasta la Guerra de Crimea). Posteriormente la Armada se dedicó al apoyo y transporte del Ejército, participando activamente con su artillería en Arica, Chorrillos y Miraflores.

Un hecho anecdótico fue la Colo Colo, una lancha torpedera de la Armada de Chile durante la Guerra del Pacífico que fue transportada en un vagón de ferrocarril, en el puerto de Ilo de la costa peruana, hasta el puerto de Puno, en el Lago Titicaca y después los ingenieros y mecánicos chilenos la rearman para lanzarla al agua. Así inicia diversos patrullajes, constituyéndose en el primer buque de guerra extranjero en navegar en el Titicaca y el primer buque de guerra chileno que surca las aguas más altas del mundo.

Durante la Guerra del Pacífico y en los años posteriores, el gobierno ordenó la construcción de buques de dos cruceros, dos cazatorpederos y la modernización de dos blindados a astilleros británicos. Se incorporaron al servicio torpedos autopropulsados de procedencia italiana, se fortificó el puerto militar de Talcahuano, en el que se inició la construcción del primer dique seco, se implementaron las primeras escuelas de especialidades en máquinas a vapor y se dictó una ley que permitiría la construcción de un acorazado y dos cruceros.

A fines de siglo, la Armada se vio envuelta como protagonista en un enfrentamiento fratricida, la Guerra Civil de 1891. Guerra en la que el bando del Congreso apoyado por la Armada obtuvo el triunfo. En el ámbito netamente naval, hubo un combate en el que dos cazatorpederos, empleando torpedos hundieron a un blindado. Por primera vez a nivel mundial, una nave acorazada era hundida por un torpedo.

Siglo XX - Tecnología[]

A comienzos del siglo XX la Armada había alcanzado un alto grado de preparación profesional, lo que le permitió tripular y operar las modernas naves que estaban engrosando su lista naval. En esa época Chile enfrentaba una especie de paz armada por la delimitación limítrofe con Argentina por el extremo austral. Además de frecuentes protestas obreras.

Lo anterior y la bonanza económica derivada de los ingresos del salitre y del cobre, permitieron al gobierno efectuar un nuevo proceso de adquisiciones: Un crucero y tres destructores en Gran Bretaña, y se ordenó la construcción en astilleros de ese mismo país de dos acorazados. La crisis con Argentina fue detenida por la diplomacia, terminando en los llamados Pactos de Mayo firmados el 28 de mayo de 1902, los que incluyeron una convención de limitación de los armamentos navales. Chile debió vender los dos acorazados y Argentina hizo lo mismo con similares naves.

Posteriormente, el gobierno aprobó una ley de renovación de las naves de la Escuadra la que dio nacimiento al Plan Centenario, que en resumen consistió en ordenar la construcción en astilleros británicos de dos acorazados de 28 000 toneladas, seis destructores de 1500 toneladas, y a una firma estadounidense la construcción de dos submarinos de 340 toneladas.

La Primera Guerra Mundial postergó y alteró el Plan Centenario; de todas las naves enviadas a construir sólo dos destructores llegaron al país antes del estallido de la conflagración y el acorazado "Almirante Latorre" una vez terminada esta.

Hacia fines de la Gran Guerra, el gobierno británico ofreció compensar a Chile por la privación de las naves enviadas a construir, y que había empleado en el conflicto, y ofreció entregarle cinco submarinos tipo H, nuevos, que estaban internados en astilleros de Estados Unidos, debido a que este tercer país aún permanecía neutral. Además se ofreció una partida de aeronaves. El gobierno aceptó la compensación propuesta y además compró un sexto submarino, las aeronaves fueron destinadas a la Armada y al Ejército.

El moderno acorazado “Almirante Latorre”, recorrido y modernizado en el Reino Unido, luego de ser empleado por la Armada británica, llegó a Valparaíso el 20 de febrero de 1921. Esta nave de 194 metros de eslora, 28 metros de manga y 9 metros de calado medio, desplazaba 28 000 toneladas. Su armamento consistía en 5 torres dobles con cañones de 14 pulgadas, 16 cañones de 6 pulgadas y 2 cañones antiaéreos de 3 pulgadas; contaba además con 4 tubos lanzatorpedos de 21 pulgadas. Esta nave fue un elemento disuasivo en las relaciones internacionales de Chile durante todo el tiempo que estuvo en servicio activo, más de 30 años y cabe destacar que Chile fue el único país, aparte de las potencias de la época, en adquirir un acorazado después de la Primera Guerra Mundial. El BB Almirante Latorre fue la unidad de batalla clásica de mayor tamaño, desplazamiento y batería principal de mayor calibre operada por nación hispano parlante alguna.

Su llegada obligó a construir un segundo dique seco, más grande en Talcahuano y la ampliación de algunos talleres y maestranzas. Sus sistemas de armamentos y de propulsión constituyeron una escuela para las generaciones de marinos que pasaron por sus cubiertas. Las escuelas de especialidades debieron mejorar y actualizar sus programas, laboratorios y profesores.

Las compensaciones post Primera Guerra Mundial dieron nacimiento a las actividades de la fuerza de submarinos y de la Aviación Naval, pioneras en América del Sur.

En la década de 1920, el “Latorre” fue enviado al Reino Unido a modernizar sus sistemas de control de tiro, más cambio de armamento antiaéreo por 4 cañones de 4 pulgadas antiaéreos, cambio de sus calderas a carbón por petróleo, adición de protección (bulges) antitorpedos en sus costados, cambio de su maquinaria auxiliar y en sus sistemas de comunicaciones. El buque regresó al país a mediados de 1931, subiendo su desplazamiento a 32 000 toneladas.

También se mandó a construir en el Reino Unido seis destructores que se denominaron clase “Serrano”, y se adquirieron tres submarinos clase “O” y un buque madre de submarinos. Se adquirieron además dos petroleros.

En septiembre de 1931 ocurrió un motín en la Escuadra, en la agrupación de buques de instrucción, en la base naval de Talcahuano y en la base aérea de Quintero de la Fuerza Aérea. Este episodio, conocido como la Sublevación de la Escuadra, fue en protesta por una importante rebaja de los sueldos y la grave situación económica del país. El Ejército derrotó a los amotinados en tierra y la Fuerza Aérea atacó con bombas a las naves de la Escuadra, días después el movimiento fue sofocado comprobándose injerencias políticas en los amotinados.

Chile en la década de 1930 vivía una difícil situación económica, la que se tradujo en la decadencia de la escuadra de acorazados y cruceros que poseía la Armada; la mayoría de las naves fueron dadas de baja y se llegó a 1940 con la Escuadra reducida al acorazado “Latorre” y una división de destructores de la clase “Serrano”.

Durante la Segunda Guerra Mundial, la Escuadra efectuó entrenamiento y cuando se le declaró la guerra a Japón, efectuó labores de patrullaje. Al término del conflicto el gobierno adquirió tres fragatas y tres corbetas construidas en Canadá y equipadas en los Estados Unidos. Estos buques antisubmarinos llegaron a Chile entre los años 1946 y 1947.

En 1942 se había dictado una legislación especial, que se conoce como la Ley de Cruceros y que fue el origen de la renovación del material de las Fuerzas Armadas. En lo que se refiere a la Armada se cambió el origen de sus adquisiciones desde Europa a los Estados Unidos.

En 1952 se adquirieron en Estados Unidos dos cruceros livianos de la Clase Brooklyn, los que llegaron a Chile ese mismo año. La incorporación de estas naves significó un importante avance tecnológico en la Armada, especialmente por sus sistemas de control de tiro que contaban con computadores analógicos mecánicos y por los radares de vigilancia de guerra electrónica y de control de fuego, los primeros en llegar al país.

En la década de 1960 se adquirieron dos destructores de la Clase Almirante en el Reino Unido, y de los Estados Unidos se recibieron dos submarinos Clase Fleet, dos destructores de la Clase Fletcher y cuatro destructores escolta tipo APD.

A partir del año 1954 renació la Aviación Naval, la que operó activamente con las unidades de superficie mediante el empleo de helicópteros en la guerra antisubmarina y en labores de exploración y rescate.

Los destructores de la clase “Almirante” fueron los dos primeros buques que recibieron sistemas de misiles antiaéreos. A cada uno se le instalaron dos montajes cuádruples para lanzar misiles SAM Sea Cat de fabricación británica. Esta instalación se efectuó en 1962 en el Arsenal Naval de Talcahuano. Chile fue la primera nación latinoamericana en contar con misiles en sus naves.

En 1967, en la Guerra de los seis días, una lancha rápida egipcia hundió un destructor israelí mediante el empleo de misiles lanzados a larga distancia. Esta acción constituyó un hito en la historia de la táctica y tecnología naval, por lo que desde esa fecha las grandes potencias comenzaron a desarrollar misiles superficie-superficie. Chile optó por equipar a sus naves con misiles franceses Exocet MM-38.

El Presidente Frei Montalva encargó a astilleros británicos la construcción de dos fragatas de la clase “Leander”, entre 1968 y 1970, en los Astilleros de Yarrow Co. Ltda. de Escocia y la modernización de los dos destructores clase “Almirante”. Estas cuatro naves fueron equipadas con lanzadores de misiles Exocet MM-38 y se les instaló modernos equipos de detección submarina.

Nuevamente la incorporación de estos sistemas de armas produjeron un avance tecnológico importante en la capacitación del personal naval en el campo de la electrónica y de los sistemas digitales.

05 HMS Devonshire after explosion Lisbon Sept 76

El HMS Devonshire (renombrado como General Baquedano) fue uno de los dos destructores que Chile adquirió a Gran Bretaña en 1976, aprovechando que dicho país los iba dar de baja por recortes al presupuesto de defensa.

En la década de 1970 la Escuadra estaba compuesta por los dos cruceros clase “Brooklyn” y por los dos destructores clase “Almirante”, a los cuales se sumaban eventualmente algunos destructores APD. Se compró a Suecia el crucero “Latorre” y en 1974 llegaron desde Estados Unidos dos destructores de la clase “Sumner”. Hacia finales de 1976 llegarían también dos destructores Clase County adquiridos al Reino Unido.

Siglo XXI – Rumbo al mañana[]

Organización[]

Antigua intendencia de Valparaiso cfegonz

Comandancia en Jefe de la Armada de Chile.

Naval Jack of Chile

Insignia Jack de la Armada de Chile.

La Armada está bajo el mando del Almirante quien ostenta el cargo de Comandante en Jefe de la Armada. Para el desempeño de sus funciones es asesorado por diversos organismos que dependen directamente de él. La Armada de Chile tiene cinco bases generales a lo largo del país:

  • I Zona Naval- Valparaíso
  • II Zona Naval- Talcahuano
  • III Zona Naval- Punta Arenas
  • IV Zona Naval- Iquique
  • V Zona Naval- Puerto Montt

Fuerzas operativas[]

El Comando de Operaciones Navales es el organismo que conduce el entrenamiento de las fuerzas navales en tiempo de paz y las operaciones en tiempo de guerra.

Del Comando de Operaciones Navales dependen: La Escuadra Nacional, la Fuerza de Submarinos, El Comando de Misileras Norte (comisnor), El Comando de Misileras Sur (comisur) la Infantería de Marina, la Aviación Naval, el Comando Anfibio y de Transportes Navales y el Comando de Fuerzas Especiales.

Las cinco Zonas Navales corresponden a la división territorial de la Armada y poseen funciones marítimas, defensivas y guarnicionales, además de ser las bases logísticas de las Fuerzas Navales de la Institución. Las Zonas Navales desarrollan la función marítima mediante las Gobernaciones Marítimas y albergan a las Bases Navales, entidades logísticas, a las escuelas institucionales y a todo el soporte de mando, técnico y administrativo institucional.

Educación naval especializada[]

La Armada desde sus inicios se ha preocupado preferentemente de la preparación de sus tripulaciones. Desde siempre le ha otorgado igual importancia a la preparación técnico-profesional del personal, como de imbuirlos en los principios valóricos y de fortaleza moral que les permitan sobreponerse a cualquier adversidad.

La Dirección de Educación de la Armada es el organismo que tiene por misión formar al personal de la institución lo que efectúa en establecimientos divididos en tres niveles:

Material bélico[]

Artículo principal: Anexo: Material Bélico de la Armada de Chile

Unidades de Superficie[]

La Armada de Chile es la unica en Latinoamerica que cuenta con un portaaviones tras la baja del portaaviones Brasileño São Paulo (A-12), se trata del Portaaviones Capitan Prat (AC-01) basado en el portaaviones frances Charles de Gaulle, aunque de propulsion convencional y más liviano (34.000 tons), trasnporta aviones de combate Dassault Rafale. Este buque fue construido e ASMAR, Thalcahuano siendo el buque más grande jamás construido en un pais latinoamericano, en este portaaviones se lograron evitar los errores de construcción cometidos en el Charles de Gaulle.

Charles de Gaulle edit

Portaaviones (AC-01) Capitan Prat en Valparaiso.

La fuerza cuenta con 10 buques de primera linea, todos con sistemas Aegis:

2 fragatas Clase Aquitania o Tipo FREMM, equipadas con misiles anti-buques MM-40 Exorcet, anti-aéreos Aster 15 y 30 y misiles de crucero SCALP. Además disponen de un helicoptero NH-90. Ambas fragatas fueron recividas en el 2010 en reemplazo de los destructores clase Country.

8 fragatas Clase Almirante Blanco Encalada, basadas en las fragatas españolas Tipo 100, aunque más pequeñas. Estan equipadas con misiles anti-buques RGM-84 Harpoon y anti-aéreos RIM-162. Además disponen de helicopteros AW-159 Wildcat. Esta fragatas fueron construidas en su totalidad en ASMAR, en el marco del proyecto tridente, el primer lote se entrego entre el 2005 y el 2010 y un segundo lote se recivio entre el 2013 y el 2016.

La Armada también cuenta con 6 buques de defensa puntual:

3 corbetas Clase Visby, elegidas por ser buques furtivos, ideales para el cumplimiento de sus tareas en ek norte de Chile. Equipadas con misiles anti-buques MM-40 Exorcet y anti-aéreos Aster 15 y 30, también disponen de un helicoptero AW 159 Wildcat. Construidas en Asmar y entregadas entre el 2016 y el 2018 detro de un plan para reemplazar a las misileras tipo 148 dadas de baja en el 2014.

3 lanchas misileras Tipo Saar 4.5. Equipadas con misiles anti-buques MM-40 Exorcet y anti-aéreos Sea Wolf.

HNLMS Rotterdam at Nieuwe Waterweg, Starboard Bow, 05.09

LHD-93 Serrano buque de la Clase Aldea.

La fuerza de submarinos dispone de 6 unidades:

4 Clase Scorpene, construidos en Francia, estas unidades son las más modernas de latinoamerica. Pueden disparar misiles anti-buque SM-39 o de crucero SCALP.

2 Tipo U-209, adquiridos en la decada de los 80's modernizados para aumentar su vida util. Pueden disparar misiles anti-buques MM-40 Exorcet o de Crucero SCALP.

La flota de guerra anfibia dispone de:

3 buques de asalto anfivio Clase Sargento Aldea, construidos en ASMAR. Al principio solo serian dos, pero tras el terremoto del 2010 se encargo una unidad más.

3 buques de desembarco anfivio Clase Batral, construidos por ASMAR en la decada de los 90's.

Aviación Naval de Chile[]

La Aviación Naval constituyen la unidad de helicópteros y aviones de la Armada de Chile. Su misión es prestar apoyo a las fuerzas navales de superficie, submarinas y de Infantería de Marina, para contribuir al éxito de las operaciones navales. Sus aeronaves realizan tareas de exploración aeromarítima y vigilancia del Mar Territorial y de la Zona Económica Exclusiva. La Aviación Naval de la Armada de Chile también cuenta con aeronaves con capacidades ofensivas, equipadas y armadas con la electrónica y sistemas de armas, necesarios para enfrentar misiones de guerra antisuperficie y antisubmarina. Para ello, cuenta con una variado número de equipos como aviones de patrulla marítima P-3 Orion y C-295 Persuader utilizados en labores de guerra antisubmarina y de guerra antisuperficie ya que cuentan con misiles Harpoon aire-superficie. Y helicópteros AS 532 Cougar armados con 2 misiles antibuque Exocet y torpedos, los que se desempeñan embarcados en buques de la Escuadra. Todo lo anterior sin considerar el apoyo aeronaval, que prestan un grupo de aviones F-16 de la FACH, equipados también con misiles antibuque Harpoon aire-superficie, adscritos a tareas de apoyo y protección aeronaval de la Escuadra, aeronaves con la capacidad de ser reabastecidas en vuelo, mediante aviones KC-135 Stratotanker , lo que les permite un mayor alcance, necesario para la función areonaval que se les ha asignado.

Otros medios importantes son los AS 365 Dauphin, que operan en labores SAR, además de los Bell 206 y Bo 105 que serán reemplazados debido a que se encuentran cerca del fin de su vida útil.

Infantería de Marina[]

Adquisiciones futuras[]

Notas[]

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