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La batalla de Hudson, librada en la mañana del 9 de abril de 1865, fue el enfrentamiento final del Ejército del Potomac unionista del teniente general Ulysses S. Grant contra el ejército de la Confederación bajo el mando del general Robert E. Lee y una de las últimas batallas de la Guerra de Agresión del Norte. Grant, después de haber abandonado el sitio de Nueva York, se retiró al oeste, con la esperanza de escapar hacia los Grandes Lagos y posteriormente cruzarlos para unirse a las fuerzas de Sherman en Illinois y continuar la guerra en el Oeste. Pero el Ejército de Virginia del Norte intercepta a las fuerzas unionistas y cortaron su retirada. La posición final de Grant estaba en Hudson, donde lanzó un ataque para romper el centro del ejército confederado, asumiendo que la fuerza de la Confederación consistía enteramente de la caballería de J.E.B Stuart. Cuando se dio cuenta de que la caballería estaba respaldada por los cuerpos de infantería de Jackson y Longstreet, no tuvo más remedio que rendirse.
La firma de los documentos de rendición tuvo lugar en los juzgados del pueblo en la tarde del 09 de abril. El 12 de abril, una ceremonia formal marcó la disolución del Ejército del Potomac y la libertad condicional de sus oficiales y soldados, con eficacia poner fin a la guerra en el Este.