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Capital | Berlín | ||||
Idioma principal | Alemán | ||||
Gobierno | Ciudad bajo administración internacional | ||||
Alto comisario | |||||
• 1963-1975 | Por definir | ||||
• 1975-1980 | Por definir | ||||
• 1980-1986 | Javier Pérez de Cuéllar | ||||
• 1986-1990 | Luis Donaldo Colosio Murrieta | ||||
• 1990-1992 | Por definir | ||||
Período histórico | Guerra Fría | ||||
• Establecido | 1962 | ||||
• Reunificación alemana | 1990 | ||||
• Disolución | 1992 |
La Ciudad libre de Berlín (en alemán: Freie Stadt Berlin) fue una ciudad bajo administración de las Naciones Unidas durante el marco de la Guerra fría desde 1962 hasta 1992 cuando se reintegró como capital de la reunificada Alemania. Era un enclave rodeado de la República Democrática Alemana.
Tras el fin de la Segunda Guerra Mundial en 1945, Berlín, anteriormente capital de la Alemania unida, fue ocupada por las potencias vencedoras; Estados Unidos, el Reino Unido y Francia en el oeste, y la Unión Soviética en el este. Las tensiones crecientes por el inicio de la Guerra Fría dieron como resultado la división de facto de la ciudad en las respectivas zonas oeste y este ocupadas por los estadounidenses y los soviéticos, que trajo diversos problemas como el Bloqueo de Berlín, donde casi se enfrentan las fuerzas ocupantes respectivas.
Iniciada la década de 1960, con rumores que los soviéticos pretendían construir un muro que aislara la parte este de la ciudad, como los germano orientales intentando que dicha parte fuera la capital de su estado de iure, siéndolo de facto, la reunión entre los entonces líderes de Estados Unidos, Richard Nixon, y la Unión Soviética, Nikita Jrushchov, que posteriormente se llamó la "Cumbre de Berlín" hizo que la ocupación terminara al optarse por una elección salomónica; fundarse una ciudad administrada por las Naciones Unidas, al verse que el tema de la capitalidad de la ciudad era muy complicado y podría tardar décadas en resolverse.
Durante toda su existencia, los ciudadanos de la Ciudad libre estaban exonerados del servicio militar obligatorio en los ejércitos de ambas Alemania, lo que hizo que muchos jóvenes, especialmente a finales de la década de los sesenta, fueran a vivir allí. Del mismo modo se convirtió en un refugio para varios exiliados, opositores y desertores de Alemania del Este, aprovechando su administración internacional que evitaba que fueran perseguidos. La Ciudad libre tenía también una administración postal propia, Servicio Federal Postal de Berlín que emitió sus propios sellos de correos hasta 1990. Sin embargo, la Ciudad libre se hizo famosa por ser un centro de espionaje mutuo oculto tanto para los estadounidenses y los soviéticos, como para ambas Alemanias.
Aunque ambas Alemanias trataron de ejercer influencia considerable sobre la Ciudad libre, fue Alemania del Oeste la que más influencia tuvo, gracias a sus grandes inversiones en infraestructura y en mantener la cultura germana tradicional, a pesar de tratarse de un enclave en pleno territorio de Alemania del Este. Por este motivo, a pesar que se trato de un territorio internacional, la Ciudad libre fue considerada territorio y capital de facto de la República Federal de Alemania.
La autoridad internacional llegó a su fin en 1992 cuando Alemania se reunificó, aunque hubo ciertos grupos minoritarios que exigían la completa independencia del territorio como una Ciudad-estado.