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Elecciones presidenciales de Venezuela de 2003 | |||||||||||
Fecha | Domingo 16 de noviembre de 2003 (primera vuelta) Domingo 7 de diciembre de 2003 (segunda vuelta) | ||||||||||
Demografía electoral | |||||||||||
Hab. inscritos | 12 341 012 | ||||||||||
Votantes 1.ª vuelta | 8 914 098 | ||||||||||
Participación | |||||||||||
72.23 % | |||||||||||
Votantes 2.ª vuelta | 9 038 770 | ||||||||||
Participación | |||||||||||
73.24 % | |||||||||||
Votos válidos | 8 479 044 | ||||||||||
Votos nulos | 559 726 | ||||||||||
Resultados | |||||||||||
Manuel Rosales – AD | |||||||||||
Votos 1.ª vuelta | 2 618 291 | ||||||||||
Votos 2.ª vuelta | 4 265 549 | ||||||||||
29.37 % | |||||||||||
50.76 % | |||||||||||
Alfredo Peña – MAS | |||||||||||
Votos 1.ª vuelta | 2 801 916 | ||||||||||
Votos 2.ª vuelta | 4 113 595 | ||||||||||
31.43 % | |||||||||||
49.23 % | |||||||||||
Ricardo Hausmann – PRVZL | |||||||||||
Votos 1.ª vuelta | 2 051 918 | ||||||||||
23.01 % | |||||||||||
Juan José Caldera – COPEI | |||||||||||
Votos 1.ª vuelta | 901 973 | ||||||||||
10.11 % | |||||||||||
Vencedor por estado | |||||||||||
Rosales: 50–54% 55–59% 60-64% 65–69%
Peña: 50-54% 55–59% 60–64% 65–69% | |||||||||||
![]() Presidente de Venezuela | |||||||||||
Las elecciones presidenciales de Venezuela de 2003 fueron el proceso electoral llevado a cabo el domingo 7 de diciembre de 2003, para elegir al Presidente de Venezuela para el período 2004-2009. El presidente Henrique Salas Römer no pudo postularse a la reelección por límites constitucionales de mandato.
Para estas elecciones, el Congreso en 2002 aprobó una reforma a la Ley Orgánica del Sufragio, estableciendo por primera vez multas para aquellos que se abstuvieran de votar injustificadamente teniendo como base el artículo 110 de la Constitución que establece la obligatoriedad del voto, debido al exponencial aumento de la abstención en los distintos procesos electorales. Las multas iban desde los 40 a los 70 dólares estadounidenses.
Fueron las segundas elecciones con segunda vuelta. La elección se disputó entre Manuel Rosales gobernador del Zulia, de Acción Democrática y Alfredo Peña alcalde del Municipio Libertador de Caracas, del Movimiento al Socialismo, quienes llegaron al balotaje después de una primera vuelta realizada el 2 de noviembre, en las que Rodríguez ganó. Las elecciones fueron sumamente polarizadas y los candidatos protagonizaron multitudinarios eventos en todo el país. Finalmente Manuel Rosales ganó las elecciones con 4 puntos de ventaja, convirtiéndose en el primer gobernante zuliano del país.
Candidatos[]
Proyecto Venezuela[]
El proceso de selección del candidato presidencial de Proyecto Venezuela estuvo marcado por la indecisión y las tensiones internas. Desde finales de 2002, diversos sectores del partido presionaron al presidente Henrique Salas Römer para que anunciara con antelación a su sucesor, argumentando la necesidad de consolidar una candidatura que capitalizara los logros de su gobierno y enfrentara de manera efectiva a los principales contendientes: Manuel Rosales, postulado por Acción Democrática, y Alfredo Peña, del Movimiento al Socialismo. Sin embargo, el mandatario prefirió mantener en reserva el nombre de su candidato, lo que generó incertidumbre tanto dentro como fuera del partido.
Fue solo en julio de 2003, a menos de seis meses de las elecciones, cuando Salas Römer anunció que Ricardo Hausmann, para entonces ministro de Planificación, sería el abanderado de Proyecto Venezuela. Hausmann, una figura destacada en el ámbito académico y técnico, gozaba de reconocimiento internacional por su labor como economista, pero carecía de experiencia en campañas electorales y de una conexión profunda con las bases populares. Su designación directa por parte de Salas Römer fue percibida como un movimiento elitista que priorizó el perfil técnico sobre el político, lo que alienó a sectores clave dentro del partido y limitó la posibilidad de generar alianzas con otros movimientos.
La campaña de Ricardo Hausmann se estructuró en torno a un discurso tecnocrático que buscaba destacar los logros del gobierno de Salas Römer, especialmente en materia económica. Durante su gestión como ministro de Planificación, Hausmann lideró la implementación de reformas orientadas a diversificar la economía, promover la inversión extranjera y reducir la dependencia del petróleo. Estas políticas, aunque aplaudidas en círculos empresariales e internacionales, tuvieron un impacto limitado en la reducción de la desigualdad y el desempleo, temas que dominaban la preocupación del electorado.
El lema de campaña, “Continuidad y Progreso,” no logró generar entusiasmo en una población que percibía al gobierno como distante y tecnocrático. Además, la falta de carisma de Hausmann, sumada a una limitada capacidad de movilización del partido en regiones clave como Zulia y los Llanos, debilitó las posibilidades de conectar con los votantes.
Movimiento al Socialismo[]
El Movimiento al Socialismo (MAS), consolidado como la principal fuerza de oposición desde su avance en las elecciones presidenciales de 1998, continuó siendo un actor central en el panorama político venezolano durante la presidencia de Henrique Salas Römer. La candidatura de Teodoro Petkoff en 1998 había permitido al MAS posicionarse como la primera minoría en el Congreso, y desde entonces, el partido se dedicó a criticar consistentemente las políticas liberales y pro-mercado del gobierno de Salas Römer. Estas críticas resonaron particularmente entre los votantes de izquierda y aquellos que tradicionalmente habían apoyado a Acción Democrática (AD), que también buscaba recuperar parte de su base electoral.
En medio de la presión para presentar un candidato capaz de unificar a la izquierda y capitalizar el descontento hacia el gobierno, el MAS optó por postular a Alfredo Peña, el popular alcalde del municipio Libertador de Caracas. Durante su gestión, Peña había ganado reconocimiento por sus políticas enfocadas en la mejora de los servicios públicos y su capacidad de conectar con las comunidades de los barrios más pobres de la capital. Su perfil enérgico y su habilidad para comunicar de forma clara y directa le aseguraron un respaldo considerable, tanto entre la militancia del MAS como en otras facciones de la izquierda.
La postulación de Peña no solo atrajo la atención dentro del MAS; también unificó a otros partidos de la izquierda. La Causa Radical y el Partido Comunista de Venezuela, partidos con un historial de cooperación y afinidad ideológica con el MAS, respaldaron la candidatura de Peña. Este apoyo consolidó una coalición de fuerzas que, aunque diversa, compartía la crítica a las políticas neoliberales del gobierno y abogaba por un retorno a una agenda de justicia social y mayor intervención del Estado en la economía.
La campaña de Alfredo Peña se caracterizó por un discurso combativo y, en ocasiones, incendiario. Si bien su propuesta se etiquetaba como un "modelo socialista radical," en la práctica, su programa de gobierno tenía más en común con la socialdemocracia que con un socialismo de corte más extremo. Peña prometía un Estado fuerte, capaz de impulsar políticas públicas inclusivas y de responder a las necesidades de la población, pero sin romper completamente con los principios de la economía de mercado.
The New York Times describió a Peña como un candidato que "combina una forma pragmática de gobernar Caracas con un discurso populista anti-establishment," subrayando la dualidad que marcaba su estilo político: pragmatismo en la gestión y retórica feroz contra las élites y el gobierno de turno. Sus discursos, dirigidos a las clases trabajadoras y a los sectores más desprotegidos, le ganaron tanto admiradores como detractores. Para algunos, su enfoque era refrescante y necesario; para otros, resultaba polarizador y arriesgado.
COPEI[]
En la Convención XIV del partido Copei, 23 de enero de 2003, se realizó una elección en la que participarían los 203 delegados donde eligieron a Juan José Caldera (hijo de Rafael Caldera) con 157 votos, como candidato en las elecciones, pues obtuvo el 77,33%, en contra a Enrique Mendoza que obtuvo el 30%. Así, Juan José Caldera sería el candidato socialcristiano.
Acción Democrática[]

Evento de campaña de Manuel Rosales.
El 15 de junio de 2002, Antonio Ledezma, Secretario General de Acción Democrática y Gobernador del Distrito Federal, anunció en una rueda de prensa en la Casa Nacional de AD en Caracas la realización de elecciones internas para elegir al candidato presidencial del partido. Las primarias se programaron para el 20 de marzo de 2003, con la intención de definir al abanderado que competiría en las elecciones presidenciales de diciembre de ese año. Ledezma subrayó en su discurso que el proceso representaba “un momento de renovación y democracia interna” para AD, tras años de crisis y desgaste político.
El primero en anunciar su candidatura fue Manuel Rosales, gobernador del Zulia desde 1998, quien había sido reelecto con amplia ventaja en 2003. Conocido por su carisma y conexión con las bases populares, Rosales se presentó como un líder renovador que buscaba distanciarse de las prácticas tradicionales del partido. En su lanzamiento oficial en Maracaibo, el 5 de julio de 2002, declaró: “Es hora de que AD regrese a las calles, a los barrios, y escuche el clamor de los venezolanos que quieren un cambio real”.
Por otro lado, Antonio Ledezma, secretario general del partido y gobernador del Distrito Federal desde 2001, también formalizó su postulación el 20 de julio de 2002, durante un acto en el Teatro Teresa Carreño de Caracas. Ledezma, conocido por su experiencia y trayectoria dentro de AD, se presentó como el garante de la unidad partidista y el defensor de las tradiciones democráticas del partido. En su discurso, expresó: “No es momento de aventuras ni de promesas vacías. AD necesita un liderazgo firme, que defienda nuestros principios y que esté preparado para gobernar”.
La campaña interna comenzó oficialmente en agosto de 2002, desarrollándose con gran intensidad en todo el país. Mientras Rosales centró su estrategia en captar a las bases militantes, especialmente en los estados del occidente del país, Ledezma apostó por consolidar el apoyo de la dirigencia nacional y de las estructuras partidistas. Sin embargo, su posición como Secretario General del partido generó críticas por parte de Rosales, quien lo acusó de utilizar la maquinaria partidista en su favor. Ledezma respondió señalando que “las elecciones internas serán transparentes y demostrarán quién tiene el verdadero respaldo de las bases”.
Rosales, quien se convirtió rápidamente en un fenómeno político dentro del partido, recorrió más de 15 estados durante los primeros meses de campaña, llevando a cabo mítines multitudinarios. Uno de los eventos más destacados tuvo lugar en Barquisimeto, estado Lara, el 10 de noviembre de 2002, donde congregó a más de 20,000 personas en la avenida Venezuela. Allí afirmó: “Este no es solo un proyecto personal, es el renacimiento de un partido que lucha por los sueños de un pueblo”.
El respaldo de figuras emblemáticas de AD se dividió entre ambos candidatos. Mientras Carlos Andrés Pérez y Diego Arria apoyaron a Ledezma, el expresidente Jaime Lusinchi rompió filas y expresó públicamente su respaldo a Rosales, calificándolo como “el hombre que puede reconciliar al partido con el pueblo”. Este apoyo inesperado de Lusinchi tuvo un impacto significativo en la percepción de Rosales como un candidato viable.

Ledezma en un mitin de campaña en Barquisimeto.
Las elecciones internas se llevaron a cabo el 20 de marzo de 2003 en un clima de alta participación. Más de 600 mil militantes acudieron a las urnas instaladas en las sedes del partido en todo el país, según cifras de la Comisión Electoral de AD. La jornada estuvo marcada por denuncias de irregularidades y tensiones entre los seguidores de ambos candidatos, especialmente en Caracas y Maracaibo.
Cerca de la medianoche, con los delegados reunidos en el Congreso Nacional de AD en Caracas, se realizó el conteo final de los votos bajo la supervisión de observadores internos y representantes de ambos bandos. Los resultados oficiales, anunciados por la Comisión Electoral del partido a las 2:30 de la madrugada del 21 de marzo, dieron la victoria a Manuel Rosales con el 57% de los votos frente al 42% obtenido por Antonio Ledezma.
La victoria de Rosales fue celebrada por sus seguidores como un triunfo de las bases sobre la dirigencia tradicional. En su discurso de aceptación, pronunciado en la sede del partido en Maracaibo, afirmó: “Hoy comienza una nueva etapa para Acción Democrática, una etapa donde los militantes tienen la última palabra”. Por su parte, Ledezma reconoció los resultados, aunque señaló que el proceso había estado marcado por un “uso indebido de recursos y presiones” que, según él, afectaron la equidad de la contienda.
Resultados[]
Primera vuelta[]
Candidato | Partido | Votos | % | |||
---|---|---|---|---|---|---|
Alfredo Peña | Movimiento al Socialismo | 2 347 082 |
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La Causa Radical | 410 048 |
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Partido Comunista de Venezuela | 44 570 |
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Total de Peña | 2 801 701 |
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Manuel Rosales | Acción Democrática | 2 563 694 |
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Organización Renovadora Auténtica | 54 375 |
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Total de Rosales | 2 618 070 |
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Ricardo Hausmann | Proyecto Venezuela | 1 903 159 |
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Movimiento de Integridad Nacional | 147 974 |
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Total de Hausmann | 2 051 133 |
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Juan José Caldera | COPEI | 901 215 |
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Total de votos/participación | 8 914 098 | 72,23 |
Notas[]
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