Se ha dado en llamar Frente del Medio Oriente, a las acciones bélicas ocurridas durante la Tercera Guerra Mundial en la región del Medio Oriente, suroeste de Asia. A modo organizativo, se divide en:
- Frente israelí
- Frente turco
- Frente arábigo
En rojo → países prosoviéticos - En rojo pálido → posibles países aliados de los soviéticos - En azul → países pro OTAN y posesiones - En azul pálido → posibles países aliados OTAN
Frente Israelí[]
Situación previa[]
Egipto[]
La crisis socio-política desembocó en el levantamiento de 1951. El movimiento revolucionario se desencadenó con el golpe militar del 30 de Septiembre de 1951, que se impuso sin demasiada oposición.
Siria[]
Adib Chichakli, primer mandatario de Siria, se volcó hacia el bloque soviético y estrechó lazos con Irak y Egipto.
Líbano[]
En el Líbano, la situación interna pasaba por momentos de tensión, debido a los conflictos entre las facciones cristianas por un lado, y las musulmanas y no religiosas del país por otro, debido a que el Gobierno comenzó a desviar sus lineamientos políticos árabes y nacionalistas, para apoyar a las potencias occidentales.
Irak[]
En Irak, el Movimiento Árabe Socialista y Nacionalista (Baaz, inspirado en el Movimiento de Oficiales Libres egipcio) actuó rapidamente y derrocó al Príncipe 'Abd al-Ilāh del Hiyaz, regente de su sobrino el Rey Faysal II de solo 16 años y nombró como jefe de estado a Abdel-Karim Qaasim, veterano de la guerra árabe-israelí de 1948. Talal I bin Abdullah, rey de Jordania desde Julio, se plegó al nuevo pacto árabe ya que temía más a las represalias de sus propios compatriotas que a las israelíes.
Jordania[]
Gobernaba Talal I bin Abdullah, quién promovió la redacción de una Constitución liberal para el Reino de Jordania que permitiese la formación de un gobierno de carácter representativo con ministros responsables de forma individual ante el Parlamento.
Guerra[]
El día 9 de octubre de 1951 se desató la Operación Badr (Operación Luna Llena).
La fecha había sido escogida con cuidado desde el punto de vista táctico, ya que la mayoría de la población civil israelí estaba ayunando y se encontraría en las sinagogas por las festividades del Yom Kippur, las defensas estarían descuidadas y muchos soldados estarían de vacaciones. El hecho de que en Israel aún se vivía en una especie de euforia por la victoria en la Guerra de 1948 y la confianza en su superioridad aérea, hicieron que Israel dudase de que los árabes se atreviesen realmente a realizar un ataque a gran escala, por lo que los israelíes se vieron sorprendidos y abocados a una desesperada defensa tanto por tierra como por aire.
Los aviones sirios y egipcios sorprendieron a la Fuerza Aérea israelí "con los pantalones bajos", según la expresión de un comandante israelí. Simultáneamente son bombardeadas Nahanya, Matsuva, Neve Ziv, Yagur, Caesarea, Tel Aviv y Dimona.
Combate aéreo entre sirios e israelies
Los aviones sirios (que incluían los modernos cazas MiG-15, además de YAK-9 y Spitfire) invadieron el espacio aéreo israelí alrededor de las 9:00 horas desde la zona de los Altos del Golán donde comenzaron los ataques sobre blindados y las posiciones del Cuartel General del ejército israelí en la zona, con incursiones en Chorasim, Kisra-Sumei y Mahanayim principalmente. En esta última la artillería siria barrió la zona para eliminar a los tanques israelíes, iniciando la penetración de sus propias fuerzas acorazadas por todo el frente abierto, en la propia Mahanayim y Kushniva hacia Chorasim, mientras los israelíes trataban de organizarse para defender la zona dividiendo sus fuerzas.
Los primeros ataques aéreos israelíes resultaron desastrosos frente a las defensas antiaéreas sirias, reciente aprovisionadas con ZPU-4). Al final del primer día las tropas sirias habían alcanzado uno de sus objetivos fundamentales, Kiryat Shmona, mientras la mayoría de los blindados israelíes se retiraban. Tiberias, al este del Mar de Galilea era el siguiente objetivo sirio y mientras, su artillería se apostaba en las laderas del sur del Golán atacando las formaciones en retirada. Al día siguiente, 10 de octubre, los blindados israelíes se encontraron con el despliegue nocturno sirio en las cercanías de Najjaf donde carros rusos tipo T-34 y T-54 (considerado como uno de los mejores tanques del mundo) darían cumplida cuenta de los Sherman israelíes, permitiendo el avance sirio más allá de Najjaf, ocho kilómetros en el interior de Israel. {C}Los libaneses y las fuerzas irregulares palestinas hace lo propio desde el norte, descomprimiendo el avance sirio.
La base naval de Haifa es atacada por submarinos rusos, mientras que la marina egipcia hace lo propio con Eliat-Ganim, en el Mar Rojo.
En gris: máximo avance árabe
El ejército jordano avanza en forma de cuña desde Al Mazraa hacia el oeste, al sur del Mar Muerto. El objetivo de máxima del ejército jordano era llegar al Mar Mediterráneo y cortar en dos a los israelíes, objetivo que no pudo ser cumplido.
El objetivo primario de las fuerzas egipcias es el nudo caminero de Be'er Sheva.
Tras cuatro oleadas de fuego artillero que barrieron la zona defensiva israelí, tropas egipcias de infantería en número de entre siete y ocho mil hombres avanzaron arrollando las defensas. Frente a los primeros movimientos de blindados israelíes la respuesta de la infantería causó numerosas bajas y permitió a las unidades desplegarse en el terreno y recibir un segundo regimiento para tomar las escasas y precarias posiciones israelíes. Cinco divisiones de infantería, parcialmente mecanizada, y unos quinientos carros de combate iniciaron el avance desde el Sinaí.
El día 13 las fuerzas egipcias y jordanas se encuentran en Rahat, embolsando al IV ejército israelí.
El mismo día hacen su entrada en la guerra las fuerzas irquíes, para reforzar a las tropas sirias en el norte.
Durante la primera semana de la guerra, Siria, Jordania, Líbano, Irak y Egipto habían podido hacer mucho daño al ejército de Israel, ocupar mucho territorio, e infligir graves daños a las ciudades.
En este momento del conflicto, las fuerzas del Ejército Árabe Unido de Liberación (Jaysh al-Inqadh al-Arabi) estaba formada por 90.000 soldados jordanos, 121.000 iraquíes, 140.000 egipcios, 219.000 sirios y 40.000 libaneses, además de un número no determinado de palestinos y voluntarios provenientes de varias regiones.
Frente turco[]
Chipre[]
Situación previa[]
A principios de 1951 se había realizado un plebiscito clandestino, dando opinión favorable a la anexión con Grecia (95,7 %).
A principios de octubre los británicos decretaron la Ley Marcial.
Mientras tanto, el EOKA (Organización Nacional de Combatientes Chipriotas), se escindía en dos facciones, una mayoritaria, integrada por aquellos que suspendieron las acciones contra los ingleses por ser estos aliados de la invadida Grecia (con la cual ambicionaban anexionarse), y la minoritaria de tendencia izquierdista que deseaba aprovechar el momento para lograr la independencia tanto de Gran Bretaña como de Grecia (y tal vez instaurar una República Popular). La primera facción estaba liderada por Makarios III y el coronel Georgios Grivas y la segunda por Tomás Papanicolau Kapetanios, quién mantenía contactos con el Ejército Popular de Liberación Nacional griego y oficiales egipcios.
A estos dos grupos antagónicos entre si, hay que agregar a los turco-chipriotas, que preferían permanecer bajo la tutela británica o bien bajo la turca (Organización de Resistencia o Volkán), liderados por Rauf Denktash.
Estallido[]
Al estallar la guerra, los británicos, que contaban con 4.000 hombres, aprovecharon estas divisiones, además de fomentar el miedo a la "peste roja" comunista. El gobernador británico, Sir John Harding se reunió con Makarios, y juntos decidieron mantener el status quo, posponer la cuestión de la Enosis (Unión con Grecia) y enfocarse en la lucha contra el bloque soviético.
Sin embargo, las acciones de Kapetanios y sus seguidores continuaron en forma de sabotajes a instalaciones militares, siendo sus simpatizantes duramente castigados.
Fuerza aérea británica[]
Desde sus bases en Chipre (Acrotiri y Dhekelia), Gran Bretaña emprendió una serie de ataques aéres en apoyo al Estado de Israel, atacando los puertos sirios de Latakia y Tartus, así como Beirut y Saida en el Líbano y Port Said en Egipto. La importancia para los británicos de conservar estas bases en Chipre consistía en la posición estratégica de Chipre, en el Mediterráneo oriental, cerca de canal de Suez y de la zona de Oriente Medio.
La dotación de la base estaba compuesta por Supermarine Spitfire, algunos Hawker Tempest y Gloster Meteor. Tanto Siria, Egipto e Israel poseían también Supermarine Spitfire y Gloster Meteor. Ninguna de estas aeronaves era rival para los MIG-15, como quedó demostrado en los distintos frentes.
Turquía[]
Mientras las ofensivas en los distintos frentes del mundo avanzaban con relativo éxito, se hizo palpable en Moscú que había llegado el momento de sacar a la Flota del Mar Negro y enviarla al Mediterráneo. Para ello se debería contar con el permiso del gobierno turco. Este había rechazado las presiones de Stalin en el pasado, siendo respaldado por las potencias occidentales.
Ante una nueva negativa, se inicia la invasión a la Turquía europea desde Bulgaria y Grecia, y a Anatolia, desde el Cáucaso.
El Cáucaso es una región natural situada en la linde entre Europa del Este y Asia occidental, entre el mar Negro y el mar Caspio, que incluye las propias montañas del Cáucaso y las tierras bajas circundantes, poseyendo una longitud total de unos 1.200 km.
Operación Gacela[]
La Operación Gacela (llamada Кавказский фронт en ruso), tenía por objetivo avanzar en territorio turco hasta Ankara y simultáneamente permitir el contacto con las fuerzas sirias e iraquíes. Sobre Irak pesaba la amenaza de un desembarco británico en la zona de Basora y la ocupación de Kuwait.
En este mismo terreno ya se habían enfrentado los ejércitos de los otrora imperios rusos y otomano durante la Primera Guerra Mundial. La Operación era dirigida por el Mariscal Illarion Vorontsov-Dashkov, caído en desgracia en 1946 y rehabilitado al comenzar la Guerra de Corea, y las fuerzas terrestres estaban al mando del General Nikolai Yudenich. El Ejército Rojo destacado en el Cáucaso tenía inicialmente una fuerza formada por unos 100.000 hombres.
El total en hombres de las fuerzas militares otomanas era muy elevado (se estima entre 100.000 y 190.000 soldados del 2° y 3° Ejército), pero estaban pobremente equipados, especialmente para las condiciones invernales que se avecinaban. Además, el suelo otoñal estaba compactado, lo que facilitaba el avance de los blindados soviéticos y el clima despejado era favorable para las operaciones aéreas.
Por otro lado, en Moscú se contaba con un alzamiento generalizado del pueblo kurdo, quienes sufrían bajo el yugo turco. El Ejército Rojo cruzó la línea fronteriza en forma implacable, arrollando a las fuerzas turcas y ocupando los distritos de Kars, Ağrı, Muş, Bingöl, Erzincan, Bayburt, Rize, Artvin y Ardahan, avanzando en cuestión de días hacia la importante ciudad de Erzurum, situada a 200 km. de la frontera.
La flota soviética atacó diversos puntos de la costa turca, inutilizando a las escasas fuerzas navales otomanas y sirviendo de apoyo a las tropas atacantes.
Así las cosas, el comandante turco, General Kazım Karabekir, decide parapetearse en la zona de Sarikamis (territorio ruso hasta 1917) y aguantar la embestida soviética en posiciones bien guarnecidas. Estos últimos no cayeron en la trampa y dejaron que los turcos atacasen, abandonaran imprudentemente su posición defensiva, a pesar de las advertencias de los oficiales norteamericanos que oficiaban como consejeros. Yudenich había recibido informes exactos sobre el lugar y la hora del ataque turco y ordenó a la artillería arrasar la zona, mientras los tanques T-54 rodeaban por los flancos al enemigo. El resultado fue una masacre. Sarikamis se convirtió en una sonada derrota para el 3º Ejército otomano.
Luego de esta estrepitosa derrota, el comando turco ordenó la retirada de Erzurum, que fue declarada ciudad abierta. Los soviéticos entraron en Erzurum sin más oposición. Tras la toma de Erzurum, el ejército del Cáucaso del general Yudenich se movió en dos direcciones: una parte fue hacia el norte, capturando la antigua ciudad de Trebisonda, mientras que el resto avanzó en dirección a Mush-Bitlis, en las cercanías del lago Van.
La OTAN, además de llevar a cabo la Operación Deep Water en la zona de Gallípoli, inició el desembarco de pertechos y hombres en los puertos turcos de Antalya, Işel, y Osmaniye.
Mientras Yudenich estaba en el norte presionando al 3º Ejército turco, el 2º Ejército turco estaba en el sur enfrentándose a la insurgencia kurda y a una parte del ejército ruso al mando del general Tovmas Nazarbekian, de origen armenio. Recordemos que el pueblo armenio había sido objeto de un genocidio a manos de los turcos en 1915.
Con la caída de Trebisonda en el norte y de Bitlis al sur, cerca del lago Van, unidades sirias se aventuraron en territorio turco pero no pudieron avanzar más que unos escasos 7 kilómetros antes de ser detenidas. Los sirios debieron retirarse con grandes perdidas y ya no intervendrían en el conflicto de manera activa. Los iraquíes se mantuvieron expectantes, ya que temían un desembarco británico en el sur. Dicho desembarco no se produjo porque Gran Bretaña ya tenía bastantes problemas en defender su suelo patrio, además de estar comprometidos en Pakistán y Malasia.
Mientras tanto, la RAF colaboraba con los turcos desde sus bases aéreas en Chipre.
Sin embargo, la presión era mucha, tanto en el este como en el norte, y a fines de octubre, el gobierno turco decidió pedir condiciones para la paz, tratando de salvar que lo que se pudiera.
Frente arábigo[]
Yemen[]
Ahmad ibn Yahya, 2° rey de Yemen y cuyo padre había muerto durante una tentativa de golpe fracasada en 1948, forjó muchas relaciones con regímenes comunistas, incluyendo la Unión Soviética y China. Su foco principal era en la modernización del los militares.
Ahmad inició una política de confrontación con Gran Bretaña, a causa del contencioso por la posesión de Adén, todavía colonia británica. Embravecidos por las palabras de Gamal Abdel Nasser, a la sazón presidente de Egipto y uno de los principales opositores de la presencia colonial británica en el Medio Oriente, los ciudadanos de Adén empezaron a reclamar la independencia que los europeos les negaban y su unión con el Reino yemenita del norte. Así surgió un grupo socialista conocido como "Frente para la Liberación del Yemen del Sur Ocupado" (FLYSO).
Las derrotas británicas en todo el mundo, alentaron las aspiraciones del joven rey. El 25 de octubre de 1951, las tropas del Reino Mutawakkilita del Yemen se adentraron en el territorio de Adén, siendo recibidas como libertadores y junto al FLYSO propinaron un seria derrota al regimiento Argyll and Sutherland Highlanders, comandados por el Teniente Coronel Colin Mitchell, quién falleció en la refriega. Los británicos se vengaron bombardeando las instalaciones portuarias de Adén, en un inútil acto de agresión.
La derrota de Adén, sumada a la anterior pérdida del Canal de Suez, supuso un duro fracaso para Gran Bretaña.
Barhéin[]
La invasión a Israel en el marco de la IIIGM causó un revuelo en la Península Arábiga, tanto entre las élites pro-occidentales, como en las fuerzas nacionalistas y pro-árabes.
Una de las regiones afectada por esta convulsión fue el emirato de Mamlakat al-Bárayn o simplemente Barhéin. Desde 1950 existía un clandestino Frente para la Liberación Nacional, patrocinado por iraníes.
Kuwait[]
El 30 de octubre de 1951, tropas iraquíes ingresan al pequeño emirato, habiendo previamente bombardeado las instalaciones militares británicas.
Omán[]
El tratado que el Reino Unido firmó a principios de 1951 con Omán, produjo un serio malestar entre las tribus del interior, que veían menoscaba la soberanía omaní una vez más. Un misterioso jefe tribal, Bolud el Kotur, logró aunar criterios y fundó el Frente Nacional Democrático para la Liberación de Omán, que estaba apoyado por Irán y Yemen y que se convirtió en un dolor de cabeza para los británicos. El FNDLO intentaba deponer al sultán y tomar el control del estrecho de Ormuz, y así controlar el flujo de petróleo que iba desde el golfo Pérsico hacia Occidente.
Las noticias de la victoria yemení no hicieron sino acelerar los planes insurgentes. Cual no sería la sorpresa al descubrir los británicos que Bolud el Kotur no era otro sino el imán Ghalib bin Alí, quién buscaba derrocar al corrupto sultán Said bin Taimur.
Ghalib bin Alí, poderoso y carismático líder religioso de la región, lanzó el 28 de octubre el "Grito de Mascate", llamando a todos los omaníes a levantarse (Jihad) contra el dominio occidental y su títere Taimur. A la acción de bin Alí, se le sumó el levantamiendo de la ciudad costera de Gwadar en Pakistán, la cual Omán había ocupado en 1950, donde un "Comité Popular Revolucionario" dominaba las calles.
Al principio las acciones resultaron favorables al sultán pero sus fuerzas estaban constituidas mayormente por mercenarios, quiénes al ver peligrar su paga, abandonaron el país luego de saquear algunas aldeas.
Abandonado por sus aliados británicos, Said bin Taimur abdicó en nombre de su hijo Qaboos bin Said Al Said, de solo 11 años, en un vano intento de apaciguar a los rebeldes, quienes con apoyo yemení cercaban la capital.
Finalmente, padre e hijo, familiares y algunos colaboradores se embarcaron en una fragata inglesa rumbo a Zanzibar y de ahí a Bristol, Gran Bretaña.
Vea también[]
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