Honduras, oficialmente República de Honduras es un país localizado en América Central. Está limitada al Norte por el Atlántico, al Este por el mismo mar y Nicaragua, al Sur por Nicaragua, el Golfo de Fonseca y El Salvador, y al Oeste Guatemala. La extensión territorial de Honduras, comprendiendo todas sus islas, es de aproximadamente 112.492 km².
Historia[]
Situación[]
Desde la independencia, Honduras ha sido sacudida con casi 300 rebeliones internas, guerras civiles y cambios del gobierno, más de la mitad de ellos durante el siglo XX. El país tradicionalmente careció tanto de una infraestructura económica como de integración social y política. Su economía basada en la agricultura vino a ser dominada en este siglo por compañías estadounidenses que establecieron enormes plantaciones de plátano a lo largo de la costa del norte. El capital extranjero, la vida de plantación, y la política conservadora dominaron Honduras desde el tardío XIX hasta mediados del siglo XX. Ahora que los presidentes observaron de que tratar de sacarle todo el potencial que tenía el país daba mucha pereza, así que dejaron que varios viniesen a explotar los recursos que poseía el país a empresas extranjeras, sobre todo de los Estados Unidos con compañías como la Rosario Mining Company que dejó nada de minerales y muchos empleados enfermos. Pero lo que hizo que sobresaliera de todas las compañías era la exportación de plátanos por parte de la Tela Railroad Company y la United Fruit Company que adquirieron grandes cantidades de terreno por decir que aportarían dinero para construír el "glorioso y majestuoso" ferrocarril transnacional,
Presidencia de Manuel Bonilla[]
Durante su mandato el conservador, Manuel Bonilla (elegido como vigésimo noveno Presidente de Honduras entre los años 1903 y 1907) encarceló al expresidente Policarpo Bonilla por dos años y tomó otras medidas para reprimir la oposición política de los liberales, que eran el único partido político organizado.
En 1906 Manuel Bonilla resistió con éxito una invasión desde Guatemala, pero este fue su último gran éxito. El pacto de amistad que tenía firmado (1906) con Guatemala y El Salvador fue interpretada como una alianza anti-Nicaragüense por el presidente Zelaya de Nicaragua. Zelaya comenzó a apoyar a los liberales exiliados de Honduras en su país en un esfuerzo por derrocar a Manuel Bonilla, quien se había convertido, en el dictador de Honduras.
Bonilla intentó resistir con la ayuda de los salvadoreños. Pero en marzo, sus fuerzas fueron derrotadas de manera decisiva, en una batalla notable por la aparición de ametralladoras en los conflictos civiles de Centroamérica.
Presidencia de Dávila Cuellar[]
La Junta Provisional de Gobierno, integrada por los generales Miguel Oquelí Bustillo, Máximo B. Rosales y J. Ignacio Castro, designó a Miguel Rafael Dávila Cuellar como nuevo presidente de la república... Las primeras medidas fueron pacificar el país y someter a los jefes rebeldes del antiguo régimen de Manuel Bonilla. La influencia de los gobiernos de Nicaragua y El Salvador en intervenir en los asuntos internos de Honduras, obligó al presidente Dávila Cuellar a movilizar tropas hacia las fronteras.
Dávila Cuellar fue electo el 1 de marzo de 1908 para su período constitucional; la administración se enfrentó a la invasión de Manuel Bonilla. Por la gravedad del conflicto político-militar, el gobierno de Estados Unidos de América intervino, mediante el USS Tacoma. Las negociaciones entre las fuerzas del gobierno y la oposición militar y de Manuel Bonilla, conocidas como Conferencias del Tacoma, con la mediación del gobierno norteamericano, se llevaron a bordo de un buque de guerra de este país anclado en la Bahía de Puerto Cortés, con la presencia del representante del departamento de Estado, Thomas C. Dawson. Como resultado de las conversaciones, el presidente Dávila renuncia y se nombra a Francisco Bertrand como gobernante provisional.
Presidencia de Francisco Bertrand[]
Francisco Bertand Barahona, doctor en medicina y cirugía, político hondureño, fue Presidente provisional de Honduras entre el 28 de marzo de 1911 y el 31 de enero de 1912.
En octubre de 1911 se practicaron elecciones para escoger al Presidente y Vicepresidente de la República para el período 1912-1916. Los resultados electorales favorecieron a la fórmula Bonilla Chirinos - Bográn Barahona. El Vicepresidente Francisco Bográn Barahona presentó su renuncia el 22 de enero de 1912, a escasos días de la toma de posesión. Se practicaron elecciones para Vicepresidente y resultó electo Francisco Bertrand Barahona. El 20 de marzo de 1913, gravemente enfermo el Presidente Manuel Bonilla Chirinos entrega la Presidencia al Vicepresidente Francisco Bertand Barahona.
Guerra civil[]
El gobernante hondureño Doctor Francisco Bertrand Barahona hace un intento por quedarse en el poder, para ello propone como presidente a su propio cuñado el doctor Nazario Soriano, quien fungía como cónsul de Honduras ante el gobierno de Estados Unidos de América.
Los detractores se alzaron en armas contra el gobierno y la supuesta sucesión amañada, donde el apadrinado de Bertrand era el único candidato con opciones.
Seguidamente en el mes de julio de 1914, Bertrand suspende las garantías de los derechos civiles de los ciudadanos, todo con el fin de que no haya elecciones e imponer a su sucesor, esta fue la detonante de la guerra civil.
En el mes de julio, Antonio López Gutiérrez, hermano del general Rafael López Gutiérrez (candidato del Partido Liberal de Honduras) y ministro de Honduras en Washington, D.C. solicitaba secretamente al Departamento de Estado que tomara medidas con el propósito de asegurar unas elecciones libres en Honduras.
Rebelión[]
Entre los cabecillas de la rebelión estaban los oficiales intibucanos Vicente Tosta Carrasco, quien era Mayor de plaza de Intibucá y al declararse dictador Bertrand, Tosta fue depuesto y encarcelado, por ser opositor político, seguidamente liberado por sus aliados y ascendido a coronel., se unió a él su compadre y paisano el coronel Gregorio Ferrera y J. Ernesto Alvarado, entre otros oficiales quienes juraron retirar a Bertrand del poder y unirse al general Rafael López Gutiérrez, quien había buscado colaboración con los liberales de Guatemala y los conservadores de Nicaragua, asimismo contaban con el beneplácito del hombre más rico de Honduras, por ese entonces don Santos Soto Rosales, quien otorgaba su residencia para las reuniones del grupo rebelde.
Desarrollo[]
El 25 de julio, el "Ejército Rebelde de Oriente" toma los municipios de La Esperanza e Intibucá, comandadas por el general José Ramírez quien falleció en la revuelta, sus oficiales coronel Vicente Tosta Carrasco y Gregorio Ferrera, recibieron ordenes de avanzar hasta las ciudades de Gracias, Santa Rosa y luego dirigirse al norte. La primera plaza en caer fue la de Gracias (Lempira) que estaba al mando del general José León Castro.
El 29 de julio, la Plaza de Cedros, Francisco Morazán a la orden del Mayor José Inocente Triminio Osorio Comandante Seccional de Cedros, es atacada por las fuerzas revolucionarias que toman la misma, previamente bajo una escaramuza de fuego cruzado.
Mientras tanto, la columna rebelde comandada por el general Rafael Salvador López Gutiérrez intentaría tomar el centro del país y la capital. López Gutiérrez combatió y derrotó a las fuerzas gubernamentales al mando del general Eulogio Flores acantonadas en la localidad de Teupasenti y seguidamente avanzó hasta tomar las inmediaciones de El Pedregalito.
Los generales José María Reina, Ernesto Alvarado y los coroneles Vicente Tosta Carrasco, Flavio Delcid y Gregorio Ferrera y el capitán Natividad Pérez líderes del “Ejército revolucionario de Occidente” inician sus operaciones bélicas en el occidente de Honduras.
El 11 de agosto, a las 05.00 horas, atacán la ciudad de Gracias seguidamente parten hacia Santa Rosa de Copán con un buen ejército y otros que se les han unido.
El día miércoles 13 comienza el combate por San Rosa y acabó el día sábado 16 de agosto con la victoria rebelde.
El general José María Reina y las tropas revolucionarias marcharon hacia Santa Bárbara encontrándose en la localidad de San Nicolás con fuerzas gubernamentales al mando del coronel Teófilo Castillo, de origen mexicano; el combate fue intenso, hasta la victoria de los rebeldes.
El embajador de los Estados Unidos en Honduras Thomas Sambola Jones solicita el cese a las hostilidades y la renuncia del presidente Bertrand, asimismo demanda ayuda del gobierno estadounidense para una intervención militar; para todo esto las muertes se cuentan en las principales ciudades: Tegucigalpa, Gracias (Lempira), La Esperanza, Santa Rosa de Copán, Santa Bárbara y San Pedro Sula, de más de 800 personas.
Renuncia y exilio[]
El 9 de septiembre de 1919 el doctor Bertrand Barahona resignó el mando ejecutivo en el Consejo de Ministros y junto con el Dr. Nazario Soriano, Froilán Turcios, Andrés Soriano y otros amigos y partidarios, se dirigió hacia San Lorenzo, en dos automóviles que llevaban el frente cubierto con la bandera de los Estados Unidos de América, para no ser detenidos, de allí partieron a Estados Unidos.
Consecuencias[]
Después de la dimisión del presidente Bertrand, y algunos días antes de la entrada en Tegucigalpa de las tropas del general López Gutiérrez, su hermano, Antonio López Gutiérrez, escribía a la División Latinoamericana del Departamento de Estado: "...es necesario que un gobierno fuerte y central sea creado. Nosotros deseamos que el Departamento de Estado nos de su apoyo moral con este fin”.
William Howard Taft, presidente de los Estados Unidos de América, envió el USS “San José” a Amapala en las costas sureñas de Honduras, con el fin de que con el diálogo, se llegase a poner fin a la guerra y "volver a la democracia". Asimismo se dio captura a los insurgentes salvadoreños que actuaban a órdenes de los rebeldes.
Después de la guerra civil emerge como candidato presidencial del Partido Liberal de Honduras el general Rafael López Gutiérrez, quien entra triunfante con sus huestes en la ciudad de Tegucigalpa el 17 de septiembre, acompañado de funcionarios estadounidenses.
Véase Tambien[]
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