El Partido Progresista de Rusia (en ruso: Прогрессивная партия, прогрессисты) se formó gracias a un grupo de liberales moderados rusos que se organizaron en 1908; consiguieron 28 diputados en la Tercera Duma.
Partido fundamentalmente burgués, representaba esencialmente los intereses de los industriales y financieros de Moscú y, en menor medida, los de las provincias, frente a los de la capital.
Ante la renuencia de los industriales de San Petersburgo a unirse a ellos, el partido no logró aglutinar a la burguesía rusa en su conjunto en una única formación política.
El partido de los progresistas expresó, en primer lugar, los intereses de las grandes empresas. En el espectro político, su lugar estaba entre los octobristas y los Kadetes. Los progresistas defendían reformas políticas moderadas, y su ideal era una estructura de gobierno cercana a la británica, con una monarquía constitucional y un parlamento bicameral, y para los diputados y los votantes se asumió una calificación de propiedad bastante alta.
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