En agosto de 1951 se celebran elecciones en España, donde gana obteniendo el 71% de los votos el Partido Unificante Ibero, un partido iberista que rápidamente mejora las relacciones diplomáticas con Portugal, le presta su ayuda económica y organiza cientos de actividades culturales, como la Expo Íbera o el Campeonato Ibero de Fútbol, donde la seleción portuguesa se enfrentó a la castellana, a la aragonesa y a la andaluza en un torneo que ganó Portugal. Este tipo de actividades hizo que la población portuguesa también sintiese un fuerte sentimiento de hermanamiento con los españoles. Este sentimiento hace que se organicen manifestaciones multitudinarias, protestas pacíficas y que surjan en Portugal docenas de partidos iberistas que acaban por unificarse en uno solo, el Partido Iberista Portugués, que en poco tiempo llega a los 500.000 afiliados.
El proceso de Unificación
En febrero de 1952 el gobierno portugués cede a la presión de las constantes huelgas y manifestaciones iberistas y decide organizar un referendum para tantear si la población en su mayoría deseaba la unificación. Las noticias llegan a España, donde el gobierno organiza un referendum para tres dias despues del portugués.
Llega el día señalado para que los portugueses voten, el 13 de febrero y la población mayor de edad acude en masa a votar. La noche del 14 se publican los resultados: 77% a favor, 11% en contra y 12% que votan en blanco.
Dos días después es el turno de los españoles, cuya población votante va en su mayoría a las urnas. Los resultados se conocen entrada la noche del 17. El resultado es apabullante, el 80% a favor ante tan solo un 9% en contra.
Al día siguiente, el 18 de febrero de 1952, se proclama en Madrid la República de Iberia y miles de personas cruzan la frontera
Aunque la población estuviese entusiasmada, todavía quedaba mucho por hacer y muchas cosas en las que ponerse de acuerdo. Para ello hacía falta una Constitución, para lo que se celebraron elecciones a cortes constituyentes el día 3 de marzo. Gente de todos los signos políticos, tanto españoles como portugueses comienzan a hacer una constitución y terminan de confeccionarla el 8 del mes siguiente, haciendose pública y convocando un referendum para aprobarla para el 20 de abril. Los iberos votan a favor en su mayoría y se crea la primera Constitución Ibera, dando por finalizado el proceso de unificación.
La Constitución del 52
La constitución del 52 dice que Iberia es una República cuyo jefe de Estado es un presidente, elegido por los ciudadanos cada 6 años y que el jefe de gobierno es un primer ministro elegido cada 4. Los símbolos nacionales son la bandera, el escudo y el himno. Quedan reconocidos todos los derechos, deberes y libertades de sus ciudadanos. También se incluyen otros muchos aspectos:
División territorial
Iberia queda dividida en varios estados, cada uno con sus regiones y estas a su vez en provincias. Los estados son los siguientes:Navarra-Vasconia con capital en Bilbao, Portugal, con capital en Lisboa; Castilla, con capital en Madrid; Aragón, con capital en Zaragoza; Andalucía, con capital en Sevilla y Atlánticas (islas), con capital en Las Palmas de Gran Canaria.
Cada uno de los estados tiene autonomía en leyes de educación, sanidad, etc.
También compone una Guardia Civil en cada estado que junta forma la Guardia Civil Ibérica.