Historia Alternativa
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Repercusiones en América[]

Con el estallido de Tercera Guerra Mundial y cumplido del vaticinio de Perón, que consideraba inevitable otro conflicto bélico de magnitud, el presidente argentino ganó un insospechado prestigio entre sus pares americanos. La brillante acción desarrollada por el Ministro de Relaciones Exteriores argentino, Dr. Juan Atilio Bramuglia, desembocó en la firma del Pacto ABC el 1º de Noviembre de 1951, y en la constitución del UNASUR posteriormente.
Una vez afianzado el ABC, las tres naciones firmantes (Argentina, Brasil y Chile), pudieron pararse de distinta manera frente a las naciones beligerantes, Gran Bretaña y EE.UU., principalmente frente a estos últimos, los cuales consideraban al sur del Río Grande su "patio trasero".
En efecto, Estados Unidos tenía un largo historial de intervenciones armadas, diplomáticas y económicas en los países de la región.
Uno de los primeros enfrentamientos se dio cuando los tres gobiernos por separado y luego en conjunto, manifestaron su estricta neutralidad en el conflicto. Recordemos que Brasil había luchado al lado de los Aliados durante la IIGM. Fueron innumerables las presiones de Washington por lograr la entrada en la guerra, siendo todas ellas rechazadas.
Incluso el ABC consiguió que Colombia, tradicional aliado norteamericano, retirara sus tropas de Japón, adonde habían sido acantonadas luego de la evacuación de Corea y además gracias a una gestión personal del presidente Perón ante el gobierno chino, los prisioneros colombianos y puertorriqueños en manos coreanas fueron liberados.
Otra fuente de conflicto fue el apoyo brindado por EE.UU. a diversos regímenes dictatoriales, como el de Somoza en Nicaragua, o los intentos de desestabilizar gobiernos democráticos que se mostraban indóciles o afectaban los intereses económicos de compañías privadas, como sucedió en Guatemala en 1952.


Argentina[]

Luego de la destrucción de Londres y con la amenaza de una inminente invasión por parte del Bloque Soviético a las Islas Británicas, Perón presionó al gobernador de las Islas Malvinas, Sir Miles Clifford, a que aceptase la incorporación a la Argentina. Clifford, temiendo verse atacado por los soviéticos y aislado de Gran Bretaña aceptó.
El 1° de enero de 1952 las primeras unidades conjuntas del ejército, armada y la aviación argentina llegaban a las Islas Malvinas, acompañadas de funcionarios gubernamentales y figuras de todo el arco político.
Se estableció que:

  • Todas las islas del Atlántico Sur se incorporarían al Territorio Nacional de Tierra del Fuego
  • Sir Miles Clifford encabezaría la Subgobernación de las Islas Malvinas creada ex profeso, hasta el 31 de diciembre de 1952, cuando sería sucedido por un funcionario argentino
  • Gran Bretaña podría continuar usando las instalaciones navales durante un lapso de 6 meses
  • Las tropas británicas podrían optar por ser repatriadas o se incorporadas a las Fuerzas Armadas Argentinas
  • Los isleños recibirían automáticamente la ciudadanía argentina
  • Aquellos isleños que desearan emigrar a Gran Bretaña, sus colonias o a cualquier otro país, recibirían una compensación económica.

Además se estipulaban una serie de medidas económicas, sociales, políticas y religiosas.
La reincorporación de las Islas Malvinas al territorio nacional, reclamo irredento desde 1833, causó algarabía y manifestaciones populares sin par en toda la Argentina.


Guayana Británica[]

A pesar de que no había firmado aún su adhesión al UNASUR, cosa que haría recién el 15 de septiembre, Venezuela contó con el apoyo de este organismo en lo referente a su reclamo frente a Gran Bretaña, por la mitad occidental de la Guayana.
A principios de marzo de 1952, siguiendo el ejemplo argentino, las tropas venezolanas penetraron en el territorio guyanés hasta el río Esequibo, desarmando a las escasas fuerzas británicas y enviándolas al otro lado del río. Gran Bretaña protestó debilmente, pero no estaba en condiciones de resistir.


Guatemala[]

Los servicios de inteligencia estadounidenses intentaron un golpe de estado contra Jacobo Arbenz Guzmán, presidente de Guatemala. Arbenz y sus populares medidas económicas habían afectado los intereses monopólicos de varias empresas norteamericanas (como la United Fruit Company) y de sus esbirros locales.
Aventada la amenaza por la decidida acción de Argentina y Brasil, Arbenz fortaleció su adhesión a la Tercera Posición.
Poco después, con la excusa del apoyo brindado a los golpistas, Arbens aprovechó el vacío de poder y anexó la Honduras Británica, territorio reclamado por Guatemala desde 1840. Arbenz depuso al gobernador británico y puso en su lugar provisoriamente a George Cadle Price, fundador del People's United Party.


Cuba[]

En septiembre de 1951 el Dr.Emilio Ochoa se había impuesto en las elecciones presidenciales cubanas. Ochoa era el líder del Partido del Pueblo Cubano y un reconocido médico sanitarista. Su alianza con socialistas y comunista, le permitió alzarce con el triunfo, pese a la propaganda norteamericana, que veía con horror a este "matasanos rojo" (como lo calificó el embajador yanqui) llegar al poder. El día de la asunción de Ochoa y su vicepresidente Carlos Rafael Rodríguez, un enviado especial del General Juan Domingo Perón, el vicepresidente Juan Hortensio Quijano encabezó la delegación argentina, para poner de relieve la importancia que se le daba a este proceso democratizador.
Meses después, durante los festejos del cincuentenario de la independencia, Ochoa denuncia la Enmienda Platt, tratado que otorgaba importantes ventajas a los EE.UU., y además exige la devolución de la Base Naval de la Bahía de Guantánamo. Esto cayó como un balde agua fría en Washington. Se barajaron distintas hipótesis, incluyendo la invasión de la isla de Cuba. La tensión duró algunas semanas e incluyeron esporádicos intercambios de disparos.


Puerto Rico[]

La situación se agravó por la renovación de la lucha independentista en Puerto Rico. El 30 octubre del 1950 había comenzado un alzamiento en la isla para sacudirse el yugo estadounidense que fue sometido a sangre y fuego. Los principales dirigentes del partido nacionalista fueron detenidos, entre ellos Pedro Albizu Campos y Blanca Canales. Pero la llama libertaria no había sido apagada y en mayo de 1952 comenzaron una serie de manifestaciones, luego que Nicolás Denis García, líder del Partido Independentista Puertorriqueño, desde la clandestinidad hiciera un llamamiento a la desobediencia civil y repudiara a la "Asamblea Constituyente" convocada por el Luis Muñoz Marín con el patrocinio norteamericano.
Los EE.UU. creyeron que podrían repetir las acciones de 1950, pero se enfrentaron con la firme actitud de las naciones latinoamericanas (Argentina, Brasil, Chile, México, Guatemala y Cuba). La coyuntura mundial no se presentaba sencilla y este foco de conflicto solo podría agravarla aún más.
Tanto el conflicto cubano como el portorriqueño se solucionaron gracias a la labor de Bramuglia, Ministro de Relaciones Exteriores argentino, quién presentó un Plan de 7 puntos, el cual fue aceptado por el Gobierno del presidente Truman. En el mismo se estipulaba el revocamiento de la Enmienda Platt, la devolución de la Base Naval de la Bahía de Guantánamo a Cuba, la independencia de Puerto Rico a partir del 25 de Noviembre de 1951  y la liberación inmediata de los prisioneros políticos.

Canadá y Groenlandia[]

Canadá, miembro de la OTAN desde la fundación de esta organización, tenía tropas desplegadas en Europa y Corea cuando comenzó el conflicto.Alguno de sus puertos, como Halifax (Nueva Escocia), eran vitales para el envío de tropas y pertrechos al frente europeo, como lo fueron durante la Batalla de Inglaterra en la IIGM. Por eso mismo se convirtió en blanco de los ataques aéreos y misilísticos soviéticos. El temor a una invasión desde Siberia a través del Círculo Polar Ártico alcanzó niveles de histeria masiva. El miedo a un ataque alemán o a un desembarco japonés durante la IIGM quedaron empequeñecidos frente a este nueva amenaza. La realidad es que los soviéticos no se encontraban en condiciones, ni técnicas ni humanas, de emprender semejante aventura.Sin embargo, muchos canadienses abandonaron las ciudades y se refugiaron en pueblos pequeños y cabañas aisladas en la espesura de los bosques. Otros, al igual que los estadounidenses, prepararon a toda prisa refugios antiatómicos, mientras los consejos sobre como actuar frente a un ataque aéreo se multiplicaban en escuelas y organismos públicos.

Defensa civil.

Las pacíficas aldeas inuit del Yukón y los Territorios del Noroeste se vieron de pronto envueltos en una febril actividad, producto del traslado de tropas desde el sur, las cuales tenían la finalidad de repeler una eventual invasión del Ejército Rojo.

Mapa Oceano Glacial Artico 2000

En su vecina Groenlandia, se vivía una fenómeno similar. Ya durante la IIGM, el gobierno danés había permitido a los EE.UU. instalar bases en Groenlandia, siendo la principal Thule, al norte de la isla. Durante la IIIGM, Groenlandia cobró una destacada importancia estratégica, al controlar parte de los accesos entre los puertos árticos soviéticos y el Océano Atlántico.

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